En condición de inseguridad alimentaria se encuentran más de 2 millones de hondureños radicados en el corredor seco, debido a las sequías provocadas por el cambio climático.
Razón por la que muchos pobladores aseguran que es necesario represas y sistemas de riego ya que en reiteradas ocasiones se ha visto afectado por extensos períodos de sequía y ciclos cortos de intensas lluvias que impactan negativamente en el estilo de vida de las comunidades cercanas.
Ante esta situación han sido muchas las ideas que se les ha brindado a los distintos gobiernos para que lo implementen, por ejemplo, tener una cooperación internacional o el mismo gobierno hondureño construya represas para almacenar agua y evitar la hambruna de muchas familias.
Hasta el momento lo que le toca a cada poblador es aspirar a desarrollar un mercado artesanal donde cada agricultor vendan otro tipo de productos con el fin de tener ingresos económicos.