Carolina cuenta con cuatro tatuajes los cuales se los ha hecho en nombre de su abuela y su madre; para Carolina su madre ha sido su figura materna y paterna a la vez, y ha sido parte fundamental en su vida para llegar a donde está.
¿Cómo fue ese tiempo en que vivió sin su mamá?
“Fue duro, yo era la mayor, y cuidaba a mis 3 hermanos, fue duro, nunca nos faltó nada, tuvimos todo lo necesario pero fue difícil porque estábamos solos, pasaron muchas cosas, vivía sola y cuidando a mis hermanitos, luego mi mamá los dejó a ellos con una tía y se separó toda la familia, mi mamá por un lado, mis hermanitos en otro lado, yo en otro, fue duro pero siempre supe entender las cosas ya que mi mamá quería solo lo mejor para nosotros y se vino a trabajar a Estados Unidos para darnos todo, en todo siempre fue mi mamá, mi papá se fue cuando tenía un año”
¿Qué significó no crecer con su padre?
“Pienso que si él hubiera estado en las etapas de mi vida hubiese sido diferente, nunca estuvo en una celebración conmigo, siempre fue mi mamá quien tomó ese papel, se puso los pantalones para cuidarnos”.
¿Cuáles son sus planes para el 2021?
“Voy a dedicarme a crecer, hacer mis cosas en Honduras, si salen bien las cosas voy a ir a Honduras de visita, tengo mis sueños de hacer una tienda de ropa, pero muchas veces no comento mis proyectos porque la gente es muy envidiosa a veces”
¿Qué mensaje le podría dar a las jóvenes que buscan el mismo sueño de ser modelo?
“Que siempre crean en lo que son, en lo que representan para la vida de otras personas, sacrificarse por lo que valga la pena, crecer, no dejarse guiar por el camino más fácil, Dios tiene propósitos y sueños para cada quien, y sólo hay que luchar por ellos, es difícil estar en otro país, pero siempre Dios está con uno y pone personas que le tienden la mano a uno, debemos tener claro lo que realmente queremos, todo es paso por paso para llegar a ser grandes”.