Fany exteriorizó su proceso en el Milla Selva, evento en el que luego conocería al “Rey de la Farándula”, Miguel Caballero Leiva, parte fundamental en su vida y quien la formó en el modelaje y además, nos contó acerca de una operación en el apéndice, la cual pudo haber cambiado su vida, para siempre.
¿Siempre quiso ser modelo o fue por accidente?
“Entre si y no, la primera vez que yo modelé realmente tenía seis años, participé en un evento cívico de la escuela yo fui la princesa y después de ahí no había hecho nada más, 10 años más tarde pasó lo del Milla Selva, en el 2008 fui la reina del Milla Selva, y luego de la agencia de modelos de Miguel mandaron una nota pidiendo a la reina del colegio y era yo, y fue ahí cuando conocí a Miguel”
Luego de ser la reina del Milla Selva la contacto miguel en la novia de Tegucigalpa y así empezó, ¿considera que él fue su mentor en el modelaje?
“Por supuesto que sí, para mi él es super especial y fue quien me formó en esto, en como posar, saber que hacer y que no, y eso me ayudó muchísimo para desenvolverme hoy en día, él encantado siempre que me ve”.
Fany recuerda lo ocurrido mientras llevaba un proceso de una cirugía, la cual aún así, no le impidió “cambiarle la vida” a muchos a través de la que considera su casa, la Loto.
“Esta parte de mi vida es muy inspiracional, cuando Dios tiene algo para nosotros nadie lo puede quitar, en el 2012, fui a hacer el casting a Loto y eran un montón de chavas, el proceso ahí es selectivo y preciso, y ya cuando me iban a contratar, amanecí con dolor en la pancita, estaba muy mal, mis padres se desvelaron, y aún así yo fui a las oficinas de Loto, y cuando me vieron pálida me llevaron de emergencia en ambulancia, me operaron en el Hospital Escuela, y resulta que me operaron, pensé que no me iban a contratar, pero me esperaron, un mes, por eso les digo que primero hay que pedir a Dios eso y eso va ser para ustedes”, contó.
¿Qué hubiese pasado si no la hubiesen contratado en Loto?
“Pues hubiese buscado otras oportunidades, soy muy talentosa en otras cosas, soy muy talentosa en muchas cosas, y si una puerta se cierra o no se abre, hubiese tocado más. Quizás hubiese tocado nuevamente la puerta de Loto y hubiese explicado lo que pasó, que de hecho, yo usaba un Blackberry, mi papá puso las 10 contraseñas para llamar a Loto y explicar lo sucedido, y cuando puso las 10 contraseñas, el celular se bloqueó, se me borró todo y perdí contactos y todo, me pasaron esas cosas previo a entrar a Loto”