La presidenta Xiomara Castro Sarmiento, este lunes se reunió con su homólogo Luiz Inácio Lula da Silva en donde destacaron que retomarán las relaciones del «camino correcto» del desarrollo para generarle esperanza a los pueblos de Honduras y Brasil".
«Con el presidente @LulaOficial retomamos el camino al desarrollo y las causas justas, interrumpido con golpe de Estado, estrechando lazos de solidaridad y dignidad para trabajar por la unidad de AL, y combatir el modelo de corrupción neoliberal que hereda pobreza y desigualdad», destacó en Twitter la mandataria hondureña.
Además, la gobernante, dijo que aprovecharán la próxima reunión en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CELAC) con el mandatario Lula da Silva para establecer un convenio de apoyo entre Honduras y Brasil.
«Nosotros tenemos que entender que estamos viviendo momentos muy parecidos como él que (Lula) está recibiendo a su país al igual como nosotros, pero la voluntad, la unidad y el respaldo del presidente es siempre firme (…), también vamos a retomar las relaciones que se tuvo con el presidente Manuel Zelaya», anunció la titular del Poder Ejecutivo de la nación centroamericana.
«Vuelve a generar esperanza para el pueblo cuando surgen gobiernos como los nuestros al tomar el camino correcto y la deuda social en nuestros países, cuando ha crecido tanto la extrema pobreza y la pobreza», señaló Castro Sarmiento.
«Por eso hemos emprendido la lucha de que existan gobiernos con igualdad, con justicia y en generar la paz que los pueblos demandan», expresó la mandataria.
El nuevo ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, embajador Mauro Vieira, señaló este lunes al asumir el cargo que la principal tarea de la política exterior brasileña será la de volver a poner al país en la mira mundial.
«Brasil está de regreso», enfatizó el diplomático en el discurso pronunciado en el palacio de Itamaraty, sede de la Cancillería brasileña.
De acuerdo con el ministro, es necesario «reconstruir el patrimonio diplomático» y devolver al gigante suramericano «al escenario de las relaciones internacionales», pues el país estuvo alejado por culpa de «una visión ideológica limitadora».
En ese sentido, Vieira se dijo consciente de que Brasil «tiene mucho que hacer para reconstruir» sus relaciones con el exterior, un rol al que el expresidente Jair Bolsonaro no dio tanta importancia.