- Evite fugas. Revise una vez al mes la instalación de tuberías, drenaje, válvula, boiler y estufa no solo ahorras, sino que también prevendrán accidentes.
- Apague el calentador. Uno de los mayores consumos de gas es dejar el calentador encendido mientras no lo utiliza.
- Utilice ollas de presión. Cocinan más rápido y ahorra hasta el 50% de gas y electricidad.
- Ocupe el agua necesaria. Cuando prepares tus alimentos, utiliza el agua estrictamente necesaria.
- Apague el foco. Solo cuando sea necesario prende las luces de tu hogar y cambia los focos tradicionales por los ahorradores de luz.
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La única forma de avanzar, si queremos mejorar la calidad del medio ambiente y la educación financiera paralelamente, es involucrarnos todos a través de un consumo responsable.