A su parecer, Mario Bros es la clara muestra de que las familias no van al cine a ser adoctrinados, sino a divertirse. Enseña a Disney que es posible celebrar un legado, adaptar sus historias al presente haciéndolas memorables y contándolas de una manera simple, pero emocionante y para toda la familia.
“En entender a los consumidores y fans, es donde triunfa Mario Bros y donde otros fracasan. La gente quiere ver a sus héroes tal cual son, tal cual los recuerdan. Recordar momentos y construir nuevos con sus familias. Eso es consistencia”, dice el experto.
“La película de Mario Bros le enseña a Disney (y a todos nosotros) la importancia de reinventarse y adaptarse a las nuevas generaciones, siendo fiel a su estilo, a su ADN, sin perder jamás lo que nos enamoró y con ello seguirá enamorándonos por generaciones. Estoy seguro de que en 50 años seguiremos gritando… ¡¡IT´S ME MARIOOOO!!”, expresa.