Un ejemplo a seguir, así es el joven Saúl Antonio Castillo quien se graduó de médico en la Universidad Nacional Autonoma de Honduras, un hondureño que ha tenido que atravesar por varios procesos difíciles en su vida, entre ellas la perdida de su padre a quien le arrebataron la vida delincuentes que cobraban el famoso “Cobro de extorsión.”
“Fue muy difícil, yo tenia 17 años, no es fácil perder uno de tus progenitores cuando se es joven, pero jamás deje de trabajar y hacer todo lo que el me inculcó, hasta el día de hoy su ausencia se siente como si fuera ayer que lo perdi.” Afirmó Castillo.
Desde entonces Castillo con mucho sacrifició comenzo a vender charamuscas y diferentes dulces para continuar con sus estudios universitarios y poder dedicar su título a su madre y padre que lo cuidada desde el cielo.