Los principales índices en Wall Street cerraron con bajas este jueves después de que trascendieran las intenciones del presidente Joe Biden de subir el impuesto sobre las ganancias de capital hasta el 43,4%. El dólar, en cambio, subió. El principal indicador de la plaza neoyorquina, el Dow Jones de Industriales, cayó un 0,94% (se estabilizó en 33815,90 puntos) pese a que los últimos datos del mercado laboral en Estados Unidsos apuntan a que sigue reduciéndose el desempleo. El selectivo S&P 500 retrocedió un 0,92% hasta los 4134,98 puntos, mientras que el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan las grandes tecnológicas, cerró con un rojo del 0,94% en 13818,41 puntos. Las caídas son leves pero marca un freno temporal a la fuerte tendencia alcista de las últimas semanas.
El S&P 500 comenzó a caer después de que Bloomberg News informara del plan de Biden de casi duplicar la tasa de este impuesto. La mayoría de los grandes grupos del S&P 500 cayeron, encabezados por las acciones de materias primas, consumo y tecnología. Los operadores también examinaron las ganancias y los datos económicos mixtos que muestran el desigual repunte de la actividad económica.
Un indicador de la amplitud del mercado sugiere que los inversores siguen preocupados. El porcentaje de miembros del Russell 2000 que cotizan por encima de su media móvil de 50 días cayó por debajo del 40%, en comparación con el 80% del S&P 500 de gran capitalización, un poco menos que un hueco récord, según datos recopilados por Bloomberg que se remontan a 1995. Es demasiado pronto para saber si esto puede convertirse en algo mayor, pero los casos anteriores han provocado una presión posterior sobre las acciones estadounidenses, escribió el fundador de Sundial Capital Research, Jason Goepfert, en una nota a los clientes.
Por otra parte, el euro cayó después de que la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, dijera que la institución no está discutiendo la retirada de sus compras de bonos de emergencia, incluso cuando ve señales de que la economía está empezando a sacudirse de la pandemia del coronavirus.