Lacthosa y Panthera presentaron los resultados de las actividades ejecutadas en el marco del convenio de cooperación para la conservación del jaguar firmado en 2018. Los resultados han sido excepcionales, lo que ha llevado a la firma de un nuevo convenio por un período de dos años adicionales. Entre los logros destacados se mencionó el primer proyecto de reintroducción de una especie que había sufrido una extinción local y que ahora ha regresado a su hábitat natural, el descubrimiento de una nueva población de jaguares, un mayor número de guardabosques activos y la adquisición de más equipo y tecnología para la protección y el monitoreo. Lacthosa ha promovido esta alianza como parte de la estrategia de Responsabilidad Social Empresarial, aportando US$100,000 para la conservación del jaguar en Honduras.
El apoyo de Lacthosa, el Servicio de Vida Silvestre de Estados Unidos (USFWS) y el ICF ha permitido volver realidad el primer proyecto de reintroducción de pecarís de collar en Honduras. Esta especie había sido extirpada (extinción local) del Parque Nacional Jeannette Kawas debido a la cacería. Varios individuos de esta especie fueron liberados en 2022 y actualmente la población asciende a aproximadamente 32 individuos en su hábitat natural; con varios eventos de reproducción exitosa registrados en las trampas cámaras. Los pecarís liberados son monitoreados con equipo de telemetría lo cual permite conocer sus movimientos y el territorio en el que se han establecido. Esto también permite a las cuadrillas de guardabosques mantener patrullajes constantes en la zona. La reintroducción de especies es parte de una tendencia internacional de conservación conocida como “Rewilding” y que incluye acciones de manejo más agresivas y con resultados contundentes, garantizando no solo la conservación de la especie, sino de todo el funcionamiento del ecosistema. Proyectos innovadores de Rewilding se están desarrollando en países como Argentina, Chile y México, ahora Honduras también dice presente en este nuevo modelo de restauración. Los pecarís han retornado a su hábitat natural en Jeannette Kawas, y ha sido gracias al trabajo en equipo de Panthera y el Instituto Nacional de Conservación (ICF).