El exmandatario de Honduras, Juan Orlando Hernández, se presentó hoy ante la sala 26 B de la Corte del Distrito Sur de Nueva York, en un ambiente cargado de expectativas y atención.
Vestido de traje y con una expresión serena, Hernández ocupó un lugar destacado en una gran mesa rectangular frente al respetado juez Kevin Castel, junto con los miembros del jurado que conformarán el panel en el caso en su contra.
Testigos presenciales informan que Hernández, al ingresar a la sala, exhibía una notable calma y compostura, reflejando una actitud serena ante los desafíos legales que enfrenta.
Al tomar asiento en la robusta mesa de madera, el exmandatario hondureño disponía de varios elementos, incluyendo una computadora portátil que albergaba toda la información en poder de la Fiscalía, así como una botella de agua, dos hojas de papel y un par de lentes de lectura que utilizaba intermitentemente.
Una pantalla frente a él permitía a Hernández seguir con atención cada etapa del proceso judicial, en cumplimiento del riguroso registro de la Corte.
Durante la audiencia, el exmandatario mantuvo una actitud tranquila y demostró estar completamente dedicado a escuchar las palabras del juez Castel, evidenciando un alto grado de atención y respeto hacia el desarrollo de los procedimientos legales.
Según detalles proporcionados por la prensa internacional, cuando el juez Castel presentó a los testigos ante Hernández, este último mostró signos de incomodidad al no poder sostenerles la mirada, optando por inclinar la cabeza en un gesto que denotaba cierta emotividad o introspección.
El caso contra el exmandatario Juan Orlando Hernández ha generado un interés significativo tanto a nivel nacional como internacional, y su comparecencia ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York marca un hito importante en el desarrollo de este proceso legal.