Un sector afectado y en abandono son los pacientes renales, por años han realizado su tratamiento en Diálisis de Honduras, y actualmente el gobierno y sus nuevas reformas no permiten que dichos pacientes sigan en este lugar para ser trasladados a otros centro de atención médica.
Ante la petición de los pacientes renales la ministra de salud, Carla Paredes mencionó que siempre trabajará en apoyar a los hondureños, brindándole una atención médica adecuada y de calidad.
Sin embargo los pacientes renales afirman que no desean ser cambiados a la empresa Nefrocentro, por muchas razones una de ellas es la confianza, altos costos y denuncian que no es buena la atención como en Diálisis de Honduras, que tiene más 20 años atendiendo la salud de los hondureños.
Hace unos días hubo una reunión con representantes de los pacientes renales para buscar una determinación a está decisión y no obtuvieron ninguna respuesta por parte de Paredes, dijo un paciente renal.
