Al menos nueve personas han perdido la vida y 821 han resultado heridas tras el fuerte terremoto que sacudió Taiwán el miércoles. El sismo, de magnitud 7,2 según la Agencia Meteorológica Central de Taiwán y 7,4 según el Servicio Geológico de Estados Unidos, golpeó el condado oriental de Hualien a las 7.58 del miércoles. La zona más afectada ha sido Hualien, donde 28 edificios se derrumbaron y numerosas personas quedaron atrapadas o varadas.
Hasta el momento, se han registrado más de un centenar de réplicas, con nueve de ellas alcanzando una magnitud de entre 5 y 6. Un total de 371.275 hogares quedaron sin electricidad, aunque la mayoría ha recuperado el suministro. La presidenta Tsai Ing-wen ha instado a la población a mantener la calma y tomar precauciones ante posibles réplicas.
Este terremoto es el más intenso que ha sufrido Taiwán desde 1999, cuando un sismo de magnitud 7,6 causó la muerte de 2.416 personas. Taiwán, situado en la confluencia de las placas filipina y eurasiática, experimenta frecuentes movimientos telúricos.
