
Mediante una decisión firme, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, suspendió la reunión de revisión del borrador del cronograma electoral, luego de que el consejero Marlon Ochoa propusiera retener por cuatro días las actas sin validación biométrica antes de ser computadas.
La propuesta generó preocupación, ya que podría retrasar la divulgación de resultados preliminares y abrir espacio para dudas sobre la transparencia del proceso.
La tensión entre los consejeros se agravó tras los señalamientos cruzados por los retrasos en las elecciones primarias. López responsabilizó a factores logísticos, mientras Ochoa apuntó a una supuesta mala planificación del CNE. En medio del conflicto, López reafirmó su compromiso con la legalidad y la transparencia electoral, negando rotundamente haber considerado suspender elecciones como lo afirmó su colega.