A pesar de que con los años siguió siendo una atracción con sus actuaciones, Miguel Caballero Leiva siempre soñaba con ser un científico, soñaba con naves espaciales, sueños locos, pero que más adelante cambiarían a lo que lo convirtieron en el hombre qué es hoy.
Su infancia y adolescencia se vio marcada por todo lo que le rodeaba, su familia y el amor al cine que le fue inculcado, su amor por la moda, los bailes, escribir, declamar y actuar. “Nunca pensé, de esto voy vivir, o me voy a profesionalizar en esto”, dijo Caballero.
¿Qué lo llevó a estudiar periodismo? “Siempre fui fanático de leer los periódicos, de leer columnas, reportajes sociales, artistas y también crónicas de películas, entre otras cosas, aun cuando estudiaba ingeniería en Sao Paulo, Brasil, yo me iba a la biblioteca a leer revistas o periódicos”.
¿Cuándo comenzó en los medios? “Comencé a los 18 años, pero no en Honduras, realmente comencé en Brasil. En Honduras inicié en 1986.