A pesar de que hace meses fue juramentada la Junta Interventora de Inversiones Estratégicas de Honduras (Invest H) para solucionar las irregularidades que han habido luego de la estafa de los siete hospitales móviles que compró Marco Bográn por $48 millones cuando era el encargado de esta empresa para combatir la pandemia del Covid 19, no se han cumplido las promesas por dicha junta y se han reportado ya que las 260 camas de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) a nivel nacional no funcionan.
Nuestro país cuenta apenas con 90 camas UCI a nivel nacional, aunque no todas son ocupadas por pacientes Covid 19, y de los siete hospitales móviles, cuatro cuentan con 20 camas UCI y otras 60 camas de los otros tres hospitales restantes, sin embargo ninguna se ha utilizado a pesar que los demás centros asistenciales muchas veces han colapsado por la ola de contagios.
Hoy, el presidente de la Asociación de Médicos, Carlos Umaña, lamentó que los hondureños estén falleciendo en los triajes, “Es lamentable esta situación mientras hondureños están pereciendo en los triajes, los hospitales móviles viven el sueño de la impunidad. Estos lugares sin funcionar tienen serias deficiencias, problemas de aire acondicionado, problemas con los monitores electrónicos etcétera”, aseguró Umaña.
Son muchos los hondureños que desde el inicio de la pandemia han visto cómo el Congreso Nacional ha aprobado millones para atender la pandemia y ese dinero no se ha visto, y es penoso que este monumento a la corrupción siga sin funcionar y se haga una cortina de humo con la captura de algunos de los responsables ya que no todos han caído; del 7 al 9 de septiembre se hará una nueva audiencia donde seguramente podría haber una resolución, pero no se devolverán las vidas que han muerto por negligencia de quienes han manejado la pandemia.