Luego de ganarse el odio y el repudio de toda la afición por su ineficiencia como técnico de la selección, Fabián Coito, ha llegado con guardaespaldas a San Pedro Sula con miras a que pudiera recibir alguna agresión por sus malos resultados.
El técnico uruguayo fue visto acompañado por dos guardaespaldas quiénes no se le despegaron en ningún momento en la terminal aérea de La Lima donde lo esperaban.
El seleccionador sudamericano no tiene ya la simpatía del público hondureño quienes a gritos piden su renuncia en la selección Catracha, y mañana, se enfrentará a la selección de Jamaica en lo que podría ser su último juego al frente de la “H”.
