El precandidato presidencial del Partido Nacional, Nasry Asfura, responsabilizó a la presidenta Xiomara Castro de la decisión del senador estadounidense Marco Rubio de no incluir a Honduras en su próxima gira internacional.
Según Asfura, la ausencia de Rubio en el país está directamente relacionada con las tensiones diplomáticas generadas por las políticas del gobierno de Castro, especialmente por las amenazas a Estados Unidos respecto a la base aérea de Palmerola y la cercanía del gobierno hondureño con el presidente venezolano Nicolás Maduro.
Asfura criticó fuertemente el rumbo que ha tomado la política exterior de Honduras bajo la administración de Castro, señalando que las relaciones con Estados Unidos se han visto perjudicadas por las decisiones controversiales del gobierno.
"La presidenta Castro ha tomado decisiones erráticas, como amenazar a Estados Unidos con la posibilidad de retirar la autorización para el uso de Palmerola, un acto que no solo es un error estratégico, sino que ha generado desconfianza entre nuestros aliados", expresó Asfura.
El precandidato también hizo referencia al vínculo diplomático con el régimen de Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, al que calificó como un "dictador".
Según Asfura, esta relación ha afectado gravemente la imagen de Honduras en el ámbito internacional y ha contribuido al alejamiento de figuras clave en Estados Unidos, como Rubio.
"Es un hecho claro que las decisiones de Xiomara Castro han alejado a Honduras de los intereses estratégicos de nuestros principales aliados, como lo demuestra la ausencia de Marco Rubio en nuestra nación.
Esto no es solo una falta de atención, es el resultado de un gobierno que está alineado con un régimen autoritario en Venezuela y que, además, pone en peligro la cooperación que históricamente hemos tenido con Estados Unidos", añadió Asfura.
Asfura también hizo hincapié en la necesidad de que el gobierno hondureño cambie su enfoque hacia la política exterior para recuperar la confianza de sus aliados y proteger los intereses de los hondureños, especialmente los que viven en Estados Unidos.
"Nuestros compatriotas en el extranjero son una de las principales fuentes de ingresos para Honduras, y el gobierno debe velar por sus derechos y por fortalecer los lazos con nuestros aliados", concluyó.
Este reclamo de Asfura llega en un momento de creciente tensión entre Honduras y Estados Unidos, lo que pone en duda el futuro de las relaciones bilaterales y la cooperación en temas de seguridad, comercio y migración.