A pesar de que se han gastado más de L1,000 millones de lempiras buscando elecciones transparentes para el próximo 28 de noviembre y además de las múltiples denuncias en anteriores procesos electorales acerca de la venta de credenciales para trabajar en las mesas electorales, ahora Juntas Receptoras de Votos (JRV), nuevamente se entregarán sin nombre o en blanco, para que sean los partidos políticos quienes acrediten a las personas que les van a colaborar en las JRV, algo que entorpecería la legalidad del proceso.
Cabe resaltar que uno de los objetivos de la creación de la nueva ley electoral era que las credenciales llevaran el respectivo nombre y partido político al que pertenecían los miembros de las Mesas Receptoras Electorales (MER) y sólo este proceso, tuvo un costo de aproximadamente L.6 millones que se pagaron a la Organización de Estados Americanos (OEA), a través de una consultoría, sin embargo, los partidos políticos, acordaron no cumplir con este requisito, ya que ha vencido la fecha en que tenían que presentar los nombres de sus colaboradores, a la secretaria general del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Esto significa que nuevamente los tráficos de credenciales que era lo que buscaba evitarse, estarán a la luz del día en los próximos comicios electorales en los cuales se buscaba transparencia, pero los partidos mayoritarios continúan con sus mañosadas.
