En un decisivo plebiscito celebrado este domingo, los ciudadanos chilenos rechazaron la propuesta para una nueva Constitución liderada por la derecha, con un contundente 55,76% de votos en contra, según el 99,7% de las mesas escrutadas.
La redacción del nuevo texto constitucional estuvo a cargo del Partido Republicano, fundado por el ultraderechista José Antonio Kast, quien expresó su reconocimiento a la mayoría de chilenos por su decisión.
José Antonio Kast, visiblemente afectado por los resultados, declaró: "Fracasamos en el esfuerzo por convencer a los chilenos de que esta es una mejor Constitución que la vigente y el camino más seguro para terminar con la incertidumbre política, económica y social".
Esta votación marca la segunda vez que los chilenos deciden sobre una nueva Carta Magna desde las protestas sociales de 2019.
A pesar del fuerte respaldo a favor del cambio constitucional tras las protestas, este segundo rechazo deja intacta la Constitución de 1980, aprobada durante el régimen de Augusto Pinochet, la cual ha sido objeto de reformas a lo largo del tiempo.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, en un discurso televisado, anunció el cierre momentáneo del proceso constitucional: "Durante nuestro mandato, se cierra el proceso constitucional.
Las urgencias son otras", señaló, reconociendo la frustración y hastío generados por el proceso entre la ciudadanía. Gabriel Boric asumió la presidencia en marzo de 2022.