El expresidente ecuatoriano Rafael Correa (2007-2017) afirmó este miércoles 16 de agosto que el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio fue un “complot” de la derecha para afectar a la aspirante del correísmo, Luisa González, y además no descarta presentarse de nuevo a las elecciones.
“Es evidente que es un complot, que está implicada la Policía. ¿Y a quién beneficia este complot? A la derecha política ecuatoriana porque necesitaban una hecatombe política así, culparnos a nosotros para impedir que ganáramos en una sola vuelta”, aseveró el exmandatario.
Correa opina que el asesinato hace una semana de Villavicencio, quien fue uno de los mayores detractores de su Gobierno y denunció varios casos de supuesta corrupción, “cambió toda la realidad y pateó el tablero electoral” rumbo a la primera vuelta de la elección presidencial, que será el próximo domingo.
“Solo una hecatombe política podía impedir nuestro triunfo en una sola vuelta y esa hecatombe fue el asesinato brutal de un adversario acérrimo nuestro, Fernando Villavicencio. Estaba en cuarto o quinto lugar (en las encuestas). Entonces les servía más muerto que vivo”, añadió.
Aunque hay seis presuntos sicarios colombianos detenidos por el magnicidio, Correa señala el presunto rol de Fausto Salinas, comandante general de la Policía Nacional, y de Patricio Carrillo, exministro del Interior (2022) y ahora candidato a legislador.