A través de una denuncia, la doctora Enid Gabriela Valle ha expuesto una serie de irregularidades que ha enfrentado durante su postgrado en Otorrinolaringología en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH). Valle, quien completó su segundo año de especialidad, se encuentra en una batalla legal tras haber sido separada de manera que considera ilegal de su programa académico.
Valle afirma que, a pesar de haber terminado el segundo año de su especialidad, la excoordinadora del postgrado, Diana Vanessa Sierra, le negó la nota final, alegando que había reprobado, lo que le impidió continuar al siguiente año académico. Este problema ha persistido durante casi 10 meses.
Uno de los incidentes más graves, según Valle, ocurrió cuando se sometió a una cirugía de vesícula. Tras la operación, Valle envió a la doctora Sierra unas fotografías en las que mostraba su herida quirúrgica para justificar su condición médica. Sin embargo, Sierra compartió dichas fotografías con sus compañeros de trabajo e incluyó las imágenes en el expediente académico de Valle, lo que ella considera una violación grave a su privacidad. Este incidente llevó a Valle a interponer una querella penal contra Sierra, cuyas audiencias están programadas para los días 28 y 29 de noviembre de este año.
Valle también señala que ha intentado comunicar su versión de los hechos al rector de la UNAH, Odír Fernández, pero hasta el momento no ha recibido respuesta. Según Valle, Fernández ha decidido creer la versión de la doctora Sierra y le ha proporcionado abogados defensores, entre ellos Enzel Meza, quien también es consultor jurídico de la rectoría. Valle considera que esto representa un conflicto de intereses, ya que Meza fue designado para resolver su reclamo administrativo.
Además, Valle expone que no es la única en enfrentar esta situación, pues existen más de 12 casos similares de médicos residentes en la UNAH que han sido excluidos ilegalmente de sus programas de postgrado. A pesar de estos reclamos, Fernández no ha tomado una postura objetiva sobre la situación.
Valle relata que, en un intento de coacción, el abogado Meza le ofreció revisar sus exámenes si retiraba la querella contra Sierra. Al negarse a hacerlo, Valle asegura que comenzó una campaña de odio en su contra por parte de Meza, quien representa a la querellante Sierra.
Valle también compartió la experiencia de una compañera que fue expulsada de manera injustificada del programa de Cirugía General, junto con otros cinco médicos residentes que llevan tres años sin respuesta. Valle denuncia que la comisión investigadora nombrada para estos casos estaba compuesta por los mismos docentes que ella había acusado.
A pesar de todo, Valle cuenta con el respaldo de varios testigos, especialistas en Otorrinolaringología del Hospital Escuela, quienes han dado fe de su desempeño. Valle asegura que muchas de las denuncias en su expediente académico son infundadas y falsas.
Finalmente, la doctora Valle hace un llamado a las autoridades del país para que investiguen los abusos que viven los médicos residentes en los hospitales y pide justicia y una pronta respuesta a su caso.