Esta estructura acordada “garantizará un juicio político justo y honesto del expresidente en el Senado”, ha reseñado el demócrata, según recoge The Hill. McConnell, por su parte, se ha mostrado “complacido” por haber llegado a un acuerdo con su contraparte demócrata para un “proceso justo y un cronograma estimado para el próximo juicio en el Senado”, que “les dará a los senadores como jurados tiempo suficiente para recibir el caso y los argumentos”.
Tanto la acusación como la defensa tendrán 16 horas durante dos días para presentar su caso, y el cronograma permitiría que el juicio terminara la próxima semana, si ambas partes acuerdan no llamar a testigos. El martes, el Senado votará la constitucionalidad del ‘impeachment’ -el principal argumento de la defensa del ex presidente-, mientras que el miércoles comenzarán los argumentos de apertura.
Después de la presentación de argumentos de las dos partes, se espera que el Senado tenga cuatro horas para formular preguntas tanto a la defensa como a la acusación. Finalmente, las dos partes tendrán dos horas para presentar los argumentos finales.