Mediante declaraciones de Kevin Rodríguez, especialista en temas energéticos de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), se alertó sobre el incremento del 20% en el costo de la energía eléctrica en Honduras durante el 2024, a pesar de los subsidios implementados por el gobierno.
Rodríguez señaló que, desde abril de 2023, el pueblo hondureño debía haber recibido una deducción del 5% en sus recibos de luz, de manera sostenible, debido a un acuerdo con 10 empresas generadoras de energía.
Sin embargo, este acuerdo no fue respetado por la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE).
El especialista explicó que la ENEE rompió dichos acuerdos y, en su lugar, implementó un sistema de paquetes de 18 adendas, que incluyen el polémico proyecto BraZabola, calificando la información divulgada por la ENEE y el presidente del Congreso, Luis Redondo, como falsa.
Según Rodríguez, el gobierno afirmó que habría rebajas en la tarifa de electricidad solo si se aprobaban estas 18 adendas, pero él asegura que 17 de ellas sí proporcionarían un descuento, mientras que el proyecto BraZabola no lo haría.
Este proyecto, inicialmente diseñado para generar energía con gas natural, sigue produciendo con diésel, un combustible mucho más caro, lo que eleva el costo de producción del kilovatio hora.
El aumento en el costo de la energía eléctrica ha llevado a que el precio alcance niveles históricos, siendo el más alto de los últimos cinco años.
Esta situación, que afecta a los hogares hondureños, genera incertidumbre sobre las verdaderas intenciones detrás de las reformas energéticas y la transparencia en los acuerdos entre las autoridades y las empresas generadoras de energía.