Desde su apertura en 2003, Gumbalimba Park se ha destacado no solo por sus hermosos paisajes tropicales, sino también por su compromiso con la protección de los animales y su entorno. La mayor parte de los animales presentes en el parque, incluidos los amigables monos capuchinos de cara blanca, aves exóticas como guacamayos y loros, y una gran población de iguanas negras, son parte de programas de conservación, lo que permite a los turistas interactuar con ellos de manera responsable y educativa. Los guías del parque están capacitados para garantizar una experiencia respetuosa con los animales, promoviendo la observación sin alteraciones de su comportamiento natural.