El actual Gobierno quiere dejar amarrados varios puestos públicos, comenzando por la Agencia de Regulación Sanitaria que dirige el doctor Francis Contreras quien fue ratificado en su puesto firmándole un contrato por cinco años el pasado mes de octubre, algo realmente penoso e insólito ya que no se puede nombrar a alguien por cinco años sabiendo que la actual administración en ese entonces sólo tenía cuatro meses más funcionando para luego darle paso a la nueva administración.
¿Qué sucede? Ahora si el Gobierno entrante no quiere trabajar con Francis Contreras como director de este ente estatal, se deberá pagar prestaciones laborales a Contreras por los cinco años del contrato recién firmado para evitar una demanda que podría ser peor, algo que indica solamente como una jugada malévola por parte de las actuales autoridades que más que amar a Honduras, con estas acciones dejan mucho que desear.