A pocos días de que el Congreso Nacional de Honduras entre en su tercer período de receso de la actual gestión, sectores diversos han señalado que los diputados se ausentarán por un mes, dejando pendientes importantes leyes y decretos, y destacando una preocupante baja en la producción legislativa.
“Realmente el Congreso ha estado en receso estos dos años y medio, está en deuda completa. El Congreso ha sido incapaz de hacer algo que impacte en la vida de los hondureños, solamente discusiones político partidarias, negociaciones para repartirse el poder, allí sí hay buenos acuerdos, allí sí hay voluntad política”, lamentó el analista Luis León.
En una línea similar, León criticó que “en la aprobación o en la toma de decisiones a favor del pueblo hondureño, ese Congreso no sirve. Más allá de la improductividad, también hay que premiarlos con descanso. Este es el peor Congreso que se ha tenido en la historia”.
Por su parte, el analista Lester Ramírez opinó: “Creo que realmente no va a haber productividad y este no es un tema que está en la agenda. Como ya hemos visto este año, ya están en campaña abierta, están dando bonos y esto significa que la productividad va a continuar estancada”.
Entre las iniciativas de importancia que seguirán siendo ignoradas por los parlamentarios destacan las reformas y la aprobación de leyes solicitadas por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para la llegada de la Comisión Internacional contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH) al país, entre otras normativas cruciales.
Del 1 al 31 de junio, el Congreso Nacional entrará en período de receso, durante el cual la mayoría de los diputados retornarán a sus municipios. Aunque se programan trabajos de comisiones durante este tiempo, en la práctica, la mayoría de las reuniones no se llevan a cabo.