El gobierno de Argentina, bajo la presidencia de Javier Milei, anunció una modificación a la Ley de Identidad de Género, que prohibirá los tratamientos de hormonización y las cirugías de adaptación en menores de 18 años.
La medida busca, según el Ejecutivo, salvaguardar la salud de los niños y adolescentes en relación con decisiones que podrían tener efectos irreversibles.
En conferencia de prensa, Manuel Adorni, vocero del gobierno, argumentó que estas intervenciones representan un "grave riesgo" para la salud física y mental de los menores, ya que alteran su proceso natural de maduración.
Además, aseguró que la modificación de la ley responde a la necesidad de proteger a los menores de decisiones que podrían ser perjudiciales a largo plazo.
Adorni también resaltó que los efectos de estos tratamientos y cirugías son, en muchos casos, irreversibles.
Finalmente, el vocero destacó que la reforma tiene como objetivo garantizar que los jóvenes puedan tomar decisiones más informadas y responsables sobre su salud una vez alcanzada la mayoría de edad.