Cada vez que visitamos un supermercado para comprar productos de la canasta básica, ya sean carnes o verduras frescas y de la mejor calidad, no nos imaginamos todo el proceso que conlleva tener alimentos del campo a la mesa, por ello, te contamos un poco de la historia de un joven agricultor.
Los sueños se cumplen
En la aldea Los Pintores del municipio de Lamaní, Comayagua, se cultiva el pepino y coliflor que se comercializa en Maxi Despensa, Paiz, Despensa Familiar y Walmart. Y es un joven de 27 años quien lidera un equipo de seis agricultores que trabajan de sol a sol para garantizar la producción de seis mil unidades de vegetales a la semana.
Se trata de Josué Edgardo Hernández, proveniente de una familia de agricultores, que aprendió a cultivar la tierra desde su niñez. Se graduó de Bachiller en Agronomía en el Instituto Polivalente Lamaní e inició a laborar en empresas dedicadas a la agroindustria.
No obstante, su anhelo era emprender un negocio propio y con sus primeros ahorros inició su sueño: cultivar la tierra. “En el 2015 emprendí con el cultivo de tomate y pepino para venderlo en el mercado informal, hasta que un amigo, al ver la calidad de mi producto, me recomendó acercarme a Walmart”, recuerda el productor.
Josué no lo dudó, por lo que con su producto en mano viajó a Tegucigalpa y regresó a casa convertido en proveedor. “Llevé pepino y coliflor y me abrieron las puertas de inmediato, al ver la calidad del producto, los ejecutivos de Walmart me ofrecieron los beneficios del programa Tierra Fértil, que era la gran oportunidad que yo buscaba”, expresa.