Tras la derrota del Olancho FC ante Marathón por 1-2, Ramón Maradiaga optó por evitar comentarios críticos sobre la actuación arbitral.
Al ser preguntado si la decisión de Melissa Pastrana de sancionar un penal a favor de Marathón había perjudicado al equipo, Maradiaga respondió: “Respeto a los árbitros.
No soy árbitro, respeto ese ámbito; son personas normales que tienen aciertos como pueden tener errores, como cualquier otra persona”.
El técnico destacó que, a pesar de la controversia, su enfoque está en mejorar el rendimiento de su equipo. “Esperamos que en el partido de vuelta nos vaya bien. No hay excusas, hay trabajo y mucho que hacer”, afirmó.
Maradiaga enfatizó que, para él, el fútbol es un juego en el que su papel como entrenador es trabajar en la preparación del equipo y no involucrarse en el desempeño de los árbitros.
“Hay que trabajar para no dar ventaja ni tregua ante Marathón. Lo que ellos hagan ya es cuestión de ellos”, concluyó el estratega.