Cientos de partidarios de Amal y Hizbulá se congregaron esta mañana al grito de «Fuera Bitar» o «Está jugando con fuego», eslóganes dirigidos al juez Tarek Bitar, días después de que éste llamase a declarar a dos exministros de Amal sospechosos de negligencia en el caso de la explosión del puerto.
En cuestión de un par de semanas, la investigación fue suspendida en dos ocasiones después de que estos y otros parlamentarios presentasen una serie de demandas pidiendo relevar al magistrado por considerarle imparcial. La última de esas demandas fue desestimada hoy mismo por un tribunal de última instancia.«El caso está siendo politizado y el juez Tarek Bitar no está trabajando bien, está trabajando en él de forma política», denunció en declaraciones a Efe el manifestante Imad Nasrat, pidiendo su destitución porque no es «adecuado para esta investigación».
El predecesor de Bitar fue cesado a principios de año a petición de los mismos legisladores de Amal: el exministro de Finanzas Ali Hassan Khalil, quien estuvo en el cargo durante los años en que el nitrato de amonio que causó la gran deflagración permaneció en el puerto de Beirut presuntamente sin custodiar, y el extitular de Obras Públicas y Transporte Ghazi Zaiter.
Ali Toubi, un abogado asistente a la protesta de hoy, aseguró a Efe que apoya a las familias de las víctimas de la explosión en su lucha por llevar ante la justicia a «todos los perpetradores», pero insistió en que el juez actúa de forma «selectiva» y carga contra «gente de un solo color y partido».