Yanina Latorre destrozada en la China Suárez por cómo trató a sus ex, Cabré y Vicuña

En las antípodas de lo correcto, de un comportamiento discursivo conciliador, Yanina Latorre siempre se las ingenios para expresar con brutal honestidad de todos los temas, sobre todo de los famosos. Ahora, la rubia compartió un muy fuerte de la concepción China Suárez.
La angelita plantea una peculiar historia con María Eugeniaque se configuró con tintes eléctricos y tensos durante el Wandagate, de ahí la exposición de Diego Latorre ofició de vocera de wanda nara, en ese triangulo amoroso que protagonizó la actual novia de correr.
Yanina Si la influencer se manifestó, de hecho se convirtió en la persona con más información que todo en el entuerto, que incluye un encuentro íntimo de la actriz con Mauro Icardi en l’oscuridad y clandestinidad de una habitación de hotel en París.
Tal grado de indignación brotó en Suárez que le envió cartas documentos, hasta activó un accionar judicial con una conciliación por los dichos públicos de Latorre, que en general se vincularon con datos que recopiló de todo ese escándalo, el más resonante de la farándula.
Ahora bien, la panelista de LAM quiso construir una peculiar definición de la Porcelanaque se vincula con su manera de tratar, de comportarse con sus ex parejas famosas, pero precisamente con una manera de moverse con Nicolás Cabré y Benjamín Vicuñalos padres de sus hijos.
Todo se englobó en la sorprendente reconciliación de laurita fernandez con el actor, un retorno más en la historia de amor que causó furor en las últimas horas, porque no se preveía una nueva posibilidad para los tortolitos, quienes vivieron varias idas y vueltas.
Ese contexto tomé la lamparita a Yanina para lanzar una definición muy picante, algo filosa, sobre Suárez: «China es una gran curadora de mujeriegos. Hizo sufrir a todos los que eran de lo peor». Una frase impactante, con el que dejó en claro que la blonda les hizo pagar con su propia medicina.
Además, Latorre soltó otro dato de Nicolás y Benjamín: «Cabré y Vicuña en los pasillos del teatro si saludan medio seco. No hay mala onda pero parece que nunca se llevó bien».
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